Los deportistas deben tener en cuenta que la exposición a la radiación ultravioleta es perjudicial, tanto en invierno como en verano. La nubosidad no bloquea la intensidad de los rayos solares, no hay que confiarse. Es necesario proteger la piel todos los días del año para evitar los daños a largo plazo. Por ello, deben usar un protector solar que cumpla con estos requisitos:

• Fórmula y textura, para una protección avanzada: los productos, además de filtros solares, deben incluir ingredientes antioxidantes y reparadores. En cuanto a la textura, es recomendable que sea ligera, para que el producto se absorba rápido y no deje residuo en la piel.
• Protector resistente al agua: En la práctica deportiva el sudor y el agua dificultan la protección solar. Es importante que el producto sea lo más resistente posible a estos factores para que su eficacia se mantenga el mayor tiempo posible.
• Factor de protección: El SPF debe ser 50 como mínimo, pero este índice solo hace referencia a la radiación UVB. Cuando hacemos deporte nos exponemos a diferentes radiaciones y es muy recomendable que nos protejamos frente a todas ellas con un protector de amplio espectro. Incluso cuando vamos al gimnasio y nos llega la radiación a través de las ventanas.
• Fotoprotección oral: Sabemos que aplicar la crema de sol nunca es fácil y siempre hay zonas que se quedan sin cubrir. Hasta el 55% de la radiación solar llega a la piel incluso aplicando crema solar. Además de reaplicar el producto cada dos horas, la fotoprotección oral es una gran ayuda para multiplicar la resistencia de nuestra piel al sol.

La tecnología Fernblock® incluida en las cápsulas de Heliocare ha demostrado, desde la primera toma, aumentar la resistencia de la piel frente a los daños de las 4 radiaciones. Esto nos ayuda a contrarrestar eficazmente la aplicación inadecuada de crema solar desde la primera toma.

El simple gesto de tomar una cápsula antes del ejercicio físico proporcionará una protección reforzada y uniforme.

Los especialistas recomiendan el uso de la fotoprotección oral, igual que la tópica, en todas las estaciones del año, no solo en verano. Es un producto apto para todos los tipos de piel y no se elimina con el agua o el sudor, por lo que no es necesario reaplicarlo. De esta manera, los deportistas pueden disfrutar de su entrenamiento al aire libre cómodamente, con la tranquilidad de saber que su piel está bien protegida contra los efectos de la radiación ultravioleta.

Además de utilizar una protección solar adecuada, es importante seguir una serie de precauciones para no poner en riesgo la salud de la piel durante el ejercicio físico.

Aplicar el producto 20 minutos antes de empezar a hacer deporte al aire libre ayuda a aplicarlo de manera correcta y uniforme. Además, hay que recordar aplicarlo cada dos horas, evitar los momentos del día con mayor intensidad de radiación (entre las 12h y las 16h) y utilizar gorra y gafas de sol.

La reflexión de los rayos varía según el tipo de superficie donde se haga deporte: la nieve refleja el 85% de los rayos solares, la arena, el 17%; el agua, el 5%; la hierba, el 3% y el asfalto, el 2%. Por lo tanto, conviene extremar las precauciones en aquellas superficies que reflejen más los rayos solares, como la nieve, sin descuidar la fotoprotección si se va a entrenar sobre hierba o asfalto. Las personas que practiquen deportes de montaña deben tener un cuidado especial ya que, a mayor altitud, mayor intensidad de los rayos solares.