[et_pb_section fb_built=»1″ _builder_version=»3.0.47″ custom_padding=»0|0px|0|0px»][et_pb_row _builder_version=»3.0.47″ background_size=»initial» background_position=»top_left» background_repeat=»repeat» custom_padding=»27px|0px|0|0px»][et_pb_column type=»1_2″ _builder_version=»3.0.47″ parallax=»off» parallax_method=»on»][et_pb_text _builder_version=»3.0.106″ text_orientation=»justified»]Se define como tumor en la piel, cualquier masa o bulto que se presente en ésta, contienen generalmente células que hacen parte de los componentes de la piel, y pueden tener diferentes orígenes. Entre ellos, malignos, se caracterizan por presentar un comportamiento anómalo, destructivo y agresivo, o benignos, no presentan un comportamiento peligroso y componen la gran mayoría de los tumores.
[/et_pb_text][/et_pb_column][et_pb_column type=»1_2″ _builder_version=»3.0.47″ parallax=»off» parallax_method=»on»][et_pb_image src=»https://dermablog.com.co/wp-content/uploads/2019/08/acrocordones.jpg» _builder_version=»3.0.106″][/et_pb_image][/et_pb_column][/et_pb_row][et_pb_row custom_margin=»2px|||» _builder_version=»3.0.106″ custom_padding=»28px|0px|27px|0px»][et_pb_column type=»4_4″ _builder_version=»3.0.47″ parallax=»off» parallax_method=»on»][et_pb_text _builder_version=»3.0.106″ text_orientation=»justified»]

Éstos son un motivo de consulta común en la práctica dermatológica, pues se presentan en la mayoría de las personas y causan preocupación por su naturaleza o porque pueden afectar la estética personal.

El ejemplo frecuente de los tumores benignos en piel, son los lunares, en dermatología denominados como nevus melanocíticos, presentes en todos los seres humanos. Se manifiestan de múltiples formas y colores, afectando cualquier parte del cuerpo y habitualmente tienen un comportamiento benigno, sin embargo, hay que conocerlos, algunos tumores malignos pueden presentarse clínicamente parecidos a los nevus o generarse a partir de éstos.

[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][/et_pb_section][et_pb_section fb_built=»1″ _builder_version=»3.0.106″ custom_margin=»10px|||» custom_padding=»0|0px|0|0px»][et_pb_row _builder_version=»3.0.47″ background_size=»initial» background_position=»top_left» background_repeat=»repeat» custom_padding=»0|0px|27px|0px»][et_pb_column type=»1_3″ _builder_version=»3.0.47″ parallax=»off» parallax_method=»on»][et_pb_image src=»https://dermablog.com.co/wp-content/uploads/2019/08/queratosis-seborreicas.jpg» _builder_version=»3.0.106″][/et_pb_image][/et_pb_column][et_pb_column type=»2_3″ _builder_version=»3.0.47″ parallax=»off» parallax_method=»on»][et_pb_text _builder_version=»3.0.106″]

Así mismo las verrugas virales, hacen parte de la clasificación de los tumores benignos, éstas pueden afectar a personas de todas las edades, incluso son bastante comunes en los niños. Son transmitidas por el papiloma virus humano y se presentan como pequeñas pápulas y placas, de aspecto verrucoso (de allí su nombre). Afectan cualquier parte del cuerpo, comúnmente las manos y plantas de los pies, siendo más severas en personas con problemas en el sistema inmunológico. Para éstas existen múltiples tratamientos, con resultados variables.

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Es importante conocer nuestra propia piel pues existen más de 30 tipos de tumores que deben ser revisados por un especialista.

En ningún caso es recomendable realizarse “quemaduras de lunares” sin antes tener una evaluación del especialista en la piel. En nuestra clínica Dermatológica puedes encontrar médicos profesionales de la dermatología reconocidos, que tienen una amplia trayectoria y experiencia en todos los tratamientos de la piel.

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Los nevus melanocíticos muestran un comportamiento benigno, por con siguiente un crecimiento lento y sin efecto de masa destructiva. Estos se pueden remover, pero casi siempre con cicatrices residuales, lo recomendado es hacerlo sólo por mejoría estética o para descartar malignidad.

El dermatólogo siempre estará capacitado para evaluar la naturaleza benigna o maligna de un tumor, sin embargo, hay varios signos que las personas en casa pueden detectar y de esta forma saber si dichas lesiones son de origen anómalo o benigno.

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El ABCDE de los lunares, es una herramienta útil para sospechar o descartar una naturaleza maligna. Si la aplicamos en un tumor, de esta forma: A: Asimetría, B: Bordes irregulares, C: Múltiples colores, D: Diámetro mayor a 6 mm y E: Tiempo de evolución.

Existen otros tumores benignos, que clínicamente se parecen a los lunares, pero son de origen distinto y, por tanto, su tratamiento es diferente. Uno clásico, son las queratosis seborreicas, que son una acumulación de células epidérmicas en la piel. Aparecen como pápulas y placas, de superficie verrucosa, de coloración variable, existiendo lesiones claras y lesiones muy negruzcas, adheridas a la superficie cutánea, incluso son parecidas a las verrugas víricas. Se presentan en múltiples lesiones, llegando a afectar extensas áreas de la piel (por ejemplo en la espalda). Su tratamiento consiste en realizar extracción de éstos, ya sea por cauterización o con crioterapia (quemar en frio).

Otro tipo de tumor común, son los fibromas laxos o acrocordones, que se presentan en múltiples cantidades, generalmente en el cuello y ocasionalmente en ingles y axilas. Se presentan como pequeños tumores alargados y de color piel o en algunas ocasiones, pigmentados. Su tratamiento se basa en la cauterización, crioterapia o incluso cortando la base con unas tijeras. A veces, las personas las confunden con “verruguitas” del cuello.

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[et_pb_section bb_built=»1″][et_pb_row][et_pb_column type=»4_4″][et_pb_text _builder_version=»3.0.106″ background_layout=»light»]

La salud de la piel y su apariencia son de gran importancia para nuestro bienestar; su función protectora de barrera contra todo tipo de agresiones ambientales (radiación ultravioleta, sustancias tóxicas e irritantes, agentes infecciosos, traumas, sequedad) dependen de su integridad. Su apariencia y su atractivo han generado a través de los años investigaciones y muchos intentos para prevenir, tratar y corregir los efectos del tiempo (edad), herencia (genética) y cambios inducidos por agentes ambientales (fotoenvejecimiento). Una piel saludable y atractiva influye positivamente en la comunicación de las personas, ya que la piel es nuestro principal órgano de comunicación no oral.

En el Siglo XIX muchas personas de ascendencia europea consideraban que la piel blanca era deseable, daba status, pues significaba que no había que trabajar al sol y las personas de piel oscura utilizaban muy frecuentemente blanqueadores y aclaradores para sentirse atractivas.

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La piel bronceada empezó a ser una exigencia de la moda desde que Coco Chanel en Paris 1929 declaró que las jóvenes modelos deben estar siempre bronceadas; esta apreciación fue tomada como un dogma por toda la cultura occidental y especialmente las mujeres decidieron tomar el sol y luego utilizar cámaras bronceadoras de luz ultravioleta, para permanecer bronceadas durante todo el año.

[/et_pb_text][/et_pb_column][et_pb_column type=»1_2″][et_pb_image _builder_version=»3.0.106″ src=»https://dermablog.com.co/wp-content/uploads/2019/01/15336081_xl.jpg» show_in_lightbox=»off» url_new_window=»off» use_overlay=»off» always_center_on_mobile=»on» force_fullwidth=»off» show_bottom_space=»on» /][/et_pb_column][/et_pb_row][et_pb_row][et_pb_column type=»4_4″][et_pb_text _builder_version=»3.0.106″ background_layout=»light»]

Naturalmente esta exigencia de la moda aceleró el proceso natural de envejecimiento. A medida que envejecemos la piel pierde su capacidad para retener la humedad, se adelgaza, pierde tonicidad y elasticidad y las líneas de expresión antes dinámicas al reír, hablar se tornan definitivas y profundas. La luz ultravioleta del sol o la de las cámaras de bronceado acelera este proceso disminuyendo no sólo la producción de colágeno y ácido hialurónico de la dermis sino acelerando su destrucción por sustancias enzimáticas llamadas metaloproteínas. Para contrarrestar estos efectos se gastan mundialmente millones de dinero en productos y en procedimientos de alta tecnología.

En Dermatológica podrás encontrar la manera de broncear y cuidar tu piel al mismo tiempo con la Plataforma de Autobronceo That’so, única tecnología en Colombia, que brinda un bronceado natural y NO utiliza radiación ultravioleta; por esto es recomendada por dermatólogos.

Además, encontrarás una gama de modernos tratamientos médicos para tratar y mejorar el fotoenvejecimiento, incluyendo: láser CO2, láser 1540, láser 2940, láser Revlite, Botox, ácido hialurónico, microdermoabrasión, IPL (luz intensa pulsada), Plasma Rico en Plaquetas, entre otros procedimientos, realizados por especialistas reconocidos nacional e internacionalmente.

 

Dra. Stella Prada, Asesora Científica Clínica Dermatológica.

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